Continúa siendo noticia todo aquello que pudiera tener relación con el ex secretario de transportes a nivel nacional. Señalan, que levantan una baldosa y aparece algo relacionado al ex funcionario. Ahora, como corresponde en un país organizado, el Juez que entiende en las causas por enriquecimiento ilícito, va al organismo que incumbe y le solicita informes sobre a quien pertenece la titularidad de la Emisora de radio LV2 de Córdoba.
Y ese organismo es el COMFER. ¡Menuda tarea para el Magistrado! si espera un informe fidedigno de este organismo que como debiera corresponder, con solo hacer un clic en su base de datos, obtendría la respuesta. Pero, no podrá ser. Y no porque desde el ente que debe oficiar de policía en materia de radiodifusión, existan intereses políticos para cubrir a Jaime, sino porque es tan amplio el desmadre imperante, que hoy resulta imposible desenredar esta madeja que salpica el sistema de algo tan sensible como la titularidad cierta de los medios audiovisuales.
Y este testimonio, no es carga para la actual gestión, en absoluto, esto viene de lejos y tengo toda la sensación de estar ante una gran bola de nieve que día a día se agranda en proporciones impensadas. ¿Existirá un frente lo suficiente rígido para detener su embestida? No, no se avizora en el horizonte. De haberse cumplido seriamente con el censo auspiciado por el Interventor del CONFER, ¿Cuánto tiempo se demorará en dilucidar la realidad, en ordenar esta desproligidad?
Pregunto desde mi ignorancia ¿Si la emisora en cuestión que pertenecía al grupo UNO-AMÉRICA se transfirió, no debió aparecer esta transacción en el boletín oficial?
Estamos en un pantano, y la radio sigue transitando en el lodazal, mientras el organismo responsable de su control ha pasado a ser lo más inoperante del estado nacional.
Y ese organismo es el COMFER. ¡Menuda tarea para el Magistrado! si espera un informe fidedigno de este organismo que como debiera corresponder, con solo hacer un clic en su base de datos, obtendría la respuesta. Pero, no podrá ser. Y no porque desde el ente que debe oficiar de policía en materia de radiodifusión, existan intereses políticos para cubrir a Jaime, sino porque es tan amplio el desmadre imperante, que hoy resulta imposible desenredar esta madeja que salpica el sistema de algo tan sensible como la titularidad cierta de los medios audiovisuales.
Y este testimonio, no es carga para la actual gestión, en absoluto, esto viene de lejos y tengo toda la sensación de estar ante una gran bola de nieve que día a día se agranda en proporciones impensadas. ¿Existirá un frente lo suficiente rígido para detener su embestida? No, no se avizora en el horizonte. De haberse cumplido seriamente con el censo auspiciado por el Interventor del CONFER, ¿Cuánto tiempo se demorará en dilucidar la realidad, en ordenar esta desproligidad?
Pregunto desde mi ignorancia ¿Si la emisora en cuestión que pertenecía al grupo UNO-AMÉRICA se transfirió, no debió aparecer esta transacción en el boletín oficial?
Estamos en un pantano, y la radio sigue transitando en el lodazal, mientras el organismo responsable de su control ha pasado a ser lo más inoperante del estado nacional.