domingo, 11 de enero de 2009

LOS AMIGOS INVISIBLES

¿Cuántas veces escuchaste este latiguillo? ¡LA RADIO ES MAGIA! Y así lo fue, hasta la llegada de la televisión, porque las voces a las que cada quien le ponía su propio envase corpóreo, se fueron desvirtuando con la imagen que nada tenian que ver con aquello que nosotros, los oyentes habíamos idealizado. Cuando en 1951 irrumpe la televisión en el país, los locutores, actores y periodistas debieron enfrentar las cámaras rompiendo aquel mito que duró treinta y un años de intriga. A diferencia de la actualidad, en la mitad del siglo pasado, el flamante medio audiovisual se nutría de profesionales de la radio, hoy como lo expreso en notas anteriores, cualquier cara bonita que luce estéticamente en televisión, conduce programas de radio. Y lo indignante, negligente e irreverente resulta cuando en alguna nota se les pregunta ¿…y ahora haces radio? ¡Si, es una nueva experiencia, me encanta, aunque no sea lo mío! Así, lamentablemente es la radio de hoy, en Buenos Aires y también en algunas plazas turísticas del país.
Este preámbulo sirve para recordar a un personaje que hizo gala de este anonimato visual durante casi tres décadas, Eugenio Félix Miletti. EL AMIGO INVISIBLE

Un clásico en las tardes de la programación de LR1 Radio El Mundo sus ondas cortas y la red azul y blanca de emisoras argentinas, fue entre los años ´40 y ´60, este cordial amigo que incorporado a la magia de la radio, deleitaba a las escuchas con su tono norteño y varonil, a través de sus poéticas reflexiones de la vida.
Llegado desde el norte argentino, recala en los micrófonos de Radio Prieto, cumpliendo la función de locutor comercial. Apenas se inaugura la flamante emisora de la calle Maipú (en 1935), Miletti crea un micro-programa que es aceptado por los directivos de Radio El Mundo. Allí se instala en principio por un año, pero ante la novedosa creación y la excelente recepción por parte de la audiencia -fundamentalmente femenina- perdura en la grilla durante casi treinta años consecutivos
.

“...y aquí está el rayo de luz con los grandes pensadores de la vida, una frase célebre que dice así:
“Si tienes un jardín lleno de flores
y una biblioteca llena de buenos libros,
vivirás en un paraíso divino.”
Señoras, señores les habló EL AMIGO INVISIBLE, muchas gracias, muy buenas tardes.”