jueves, 8 de enero de 2009

PARTENAIRES EN EL AIRE


Quienes hayan leído las notas anteriores de este Blog, habrán observado que al mencionar con nombre propio a algunos LOCUTORES, también agrego su rol de Animadores o Maestros de Ceremonias, tal la terminología que se utilizaba por entonces. Hoy, en nuestra alicaída radiofonía este rubro es indicado como “CONDUCTORES”. Hasta aquí, todo sería igual, excepto el cambio de calificación. Pero, no es así. ¿Hoy los Locutores cumplen el doble rol de los de antes? No, en absoluto, en estos tiempos son minoría, salvo muy contadas excepciones. La conducción de los programas de radio como también de televisión, recae en actores, modelos, periodistas o pseudo vedettes de casting en dos plazas. ¿Y los locutores que estudiaron tres años, previo riguroso examen de ingreso? ¿Y los verdaderos conductores que han hecho de su vida una trayectoria frente al micrófono? Así como en una nota anterior hablo del Estado ausente, también en este caso se puede emplear esta deducción. Desde este espacio de debate, entiendo que a los jóvenes que acceden a la carrera se los está engañando y mal. Porque hoy, en los medios audiovisuales los locutores sólo se limitan a dar los datos del tiempo, los teléfonos de la radio y festejar obligadamente las muchas veces infelices e irreverentes frases del improvisado conductor. ¿Para esta labor de PARTENAIRE, hay que estudiar tres años? Entiendo que quien egresa de un Instituto Oficial con el preciado carnet de locutor, tiene la suficiente capacidad para conducir los programas, y los actores, médicos, periodistas, etc. deben ser columnistas que dialoguen con el conductor profesional. Aquellos ilustres Maestros de Ceremonias, que eran LOCUTORES, NO HICIERON CURSO ALGUNO, eran profesionales autodidactas por convicción, vocación y capacidad, porque para trabajar en una emisora debían ser admitidos rigurosamente por un ilustrado en la materia. ¡He aquí la gran diferencia!