viernes, 3 de julio de 2009

FELIZ DIA LOCUTORES

“Esa voz amiga es el Locutor,
tanto se identifica con él, que
cada uno tiene su locutor preferido.
Es su mejor amigo,
se despierta con él y se duerme con él.
Por eso entonces, el Locutor no es un
simple locutor, es muchísimo más,
es algo más, es algo que tendría que venir algún autor griego para describirlo”
ENRIQUE TELEMACO SUSINI
Co Fundador de la RADIOTELEFONIA ATGENTINA
27-Agosto-1920

Hoy, 3 DE JULIO, es el día del locutor Argentino. Digna profesión que desde el anonimato que genera la radio, pasa a transformarlo en el amigo incondicional del oyente. Su palabra, sus consejos y estilo propio, lo ubican en ese afable e irremplazable generador de complicidad para quienes somos receptores de su trabajo. El locutor, como los artistas, siempre ha debido sortear sus más profundos pesares personales, para a través de su voz, única herramienta de la profesión, transmitir aquello que el oyente merece recibir. Claro que hablar en estos tiempos de esta profesión gestada en nuestro país por verdaderos profesionales, no resulta fácil. Aquellos oyentes, que como en mi caso hemos conocido y disfrutado de estos generadores de ilusiones, mucho nos cuesta valorar hoy, esta actividad totalmente devaluada. Cuando comencé a escuchar radio, a fines de la década del `40 del siglo pasado, percibía tal como lo expreso anteriormente que los locutores/as, eran verdaderos caballeros y damas, aún sin el mentado estudio terciario al que desde los años `60 han degradado este titulo generado por aptitud y condiciones naturales. Estos locutores, verdaderos eruditos en su quehacer eran autodidactas y apasionados de la profesión elegida. Los locutores, se hacían a pulmón y con la estricta orientación de destacados directores artísticos de las radios, cargo que por estos tiempos suele estar en manos de inexpertos incipientes. Pero, en este homenaje, que pretende ser aleccionador para quien desee así interpretarlo, debo ser absolutamente sincero con mi sentir. Hoy no existen aquellas damas y caballeros de traje y corbata que con su profesionalismo y personalidad se incorporaban decididamente en el sentimiento del oyente con peso propio. En mi apreciación, mucho tiene que ver en esto la asociación que los nuclea. En los años `70, aquellos que recibían su titulo o el tan famoso carnet, creyeron que eran los descubridores de la radiofonía, y el tiempo ha sido testigo de que no era así. Muchos, por no decir la mayoría han debido dejar la profesión, viéndose obligados a colgar la credencial, con la que denostaban a aquellos eruditos que no la poseían, en un manifiesto acto de discriminación. Aquel lugar que laboralmente ocuparon aquellos viejos locutores, hoy son ocupados por periodistas, actores, actrices, modelos y lo peor, por advenedizos que previa compra de un espacio hacen, dicen y se mal expresan sin pudor alguno. Es que en aquella radio que me fascinó como compañía para la vida, los locutores oficiaban de relatores, animadores y maestros de ceremonias, además de los avisos comerciales en vivo, acentuados por su propio estilo. Hoy todo aquello se ha perdido inexorablemente y sin retorno. El equivoco celo absurdo de la Sociedad Argentina de Locutores, en connivencia con el Estado, ha transformado al locutor en un ser sin identidad ni futuro, al extremo que sea reemplazado por la computadora. Hoy el locutor de turno es sólo una persona que se limita a dar los teléfonos y la temperatura en el mejor de los casos, salvo contadas excepciones, resultando ser un simple y triste partenaire del conductor. En la Capital, y en cualquier ciudad del país, son contados los LOCUTORES con protagonismo. En la vieja radio, el locutor era sinónimo de predominio ¿A qué puede aspirar en estos tiempos alguien que después de un exhaustivo examen de ingreso y tres años de carrera, tiene como oferta laboral un simple turno de informativista, locutor de medio turno o movilero? Si bien hoy existen infinidad de radios, aunque no oficiales, tampoco éstas son garantía de fuente laboral, porque la gran estrella es la maquina que emite voces a escaso costo. Entiendo que ha llegado el momento de jerarquizar esta apasionante profesión, no tiene sentido alguno tanto esfuerzo, para aspirar al más magro status dentro del medio, con sueldos exiguos, acordes a la pobreza intelectual que hoy ostentan quienes pretenden ser simples locutores y nada más que eso, de por vida, porque las escuelas no generan mas que clones en tonos de voces y estilos, carentes de personalidad. Hoy, la gran mayoría de los graduados, de la única manera en que pueden improvisar una frase de corrido es recurriendo a la vulgaridad del lenguaje cotidiano de la calle, con un total desconocimiento del buen uso del vocabulario y del idioma castellano, amen de carecer de conocimientos de los precursores de nuestra radio, de quienes debieran aprender y mucho por cierto. Dias pasados en un taller de periodismo/locución del interior, pregunte a un grupo de aspirantes si conocian quien era Fontana y no, no lo conocian. ¡ Chicos si en este país no conocen a Gardel, que mal preparados estan !

Sería muy extenso en este homenaje mencionar a todos aquellos viejos locutores que hicieran gala de la profesión, pero sólo con nombrar algunos de ellos, servirá para encolumnar en las mentes de quienes accedan a esta nota, a tantos famosos e irremplazables, que también por extrema falencia de la S. A. L. y los institutos, han quedado injustamente en el olvido.
Dejo librada mi mente y a ella vienen nombres de ilustres locutores estables:
ANIBAL CUFRE-LR4, RINA MORAN-LR1, RAUL GONZALEZ ALCANTARA-LR3, RICARDO JURADO-LR4, HORACIO GALLOSO-LRA, ANSELMO MARINI-LS10, ERNESTO PETRONE-LR5,ELDA CORDOBA LR6, LUIS DANIEL UNCAL-LR9, CARLOS SOL-LS4, ALCIRA MUSSA-LS6, OSCAR DEL PRIORE-LR2, ANA MARIA MARTÍ-LR3, MATHA LACLOO-LR4, CLEMENTE MARCHANT-LR4, ROBERTO REAL-LR4, JOAQUIN DARQUIE-LR3, LUIS PEDRAJAS-LR1, ISABELITA MARCONI-LR3, MARGOT PEREZ DEL CERRO-LR4, DORITA PALMA-LR1, LUCIA MARCÓ-LR3, RAFAEL DIAZ GALLARDO-LR1, RAFAEL MONZON-LR4, BENJAMIN BENITO-LR4, JORGE BEILLARD-LR5, JORGE HOMAR ( sí con h) DEL RIO-LR1, CARLOS FONTANA-LR3,BENJAMIN BENITO-LR4, PERLA MARQUEZ-LR1-LR3-LR4, FEDERICO DOMINGUEZ-LR3, NILDA MONTANARO-LR9, ALBERTO PALAZZON-LR6, ROBERTO AREVALO-LR6, HECTOR LAGUNA-LR1, RICARDO ALBERTO MARIN-LS10, ALBERTO MAGDALENO-LR1, JUAN CARLOS ASTOLFI-LR4, RAFFI-LR2, DARDO QUIROGA-LR3, LYDIA DURAN-LR4, MANUEL AISINER-LR9, MARTHA MORENO-LR6, CIRO DANTE-LR9, MARTHA CANTELA-LR6, JULIO VIVAR-LR4, JUAN RAMON BADIA-LS4, MARÍA ESTHER VIGNOLA-LR1, ALBERTO ZABALZA-LS10, MIGUL FRANCO-LR2, LIDIA SANCHEZ-LS10, OLGA MHUR-LR4, NORMA LUGANI-LR9, ANGEL ROJAS-LS5, MARGARITA TATIA-LR1, FAUSTINO GARCIA-LS5, OSCAR MARQUEZ-LS5, WALTER REYNA-LR5, ALBERTO ALEJANDRINO-LR5, ROBERTO HERRERA-LS10, CAPUANO TOMEY-LR2, EDMUNDO SAGASTIZABAL-LS6, GERMAN FUNES-LS6, NUCHA AMENGUAL-LR5, JAIME MAS-LR3, IGNACIO DE SOROA-LR3, ALBERTO CORREA CORDOBA-LS10, MARIA TERESA BONELLI-LR1, JULIO CESAR BARTON-LR1, ARNOLDO CHAMOT-LR1, VICENTE CHUMILLA-LR1, etc. Lo dicho, sería interminable la nómina de personalidades de la radiotelefonía que han quedado grabados en la historia y que nunca se borrarán de la memoria de quienes fueron sus fieles oyentes. No es mi intención seguir señalando culpables de este deterioro de la profesión, pero ésto no es lo que soñaron aquellos hombres que crearon el medio radiofónico y quienes se agruparon para conformar la por entonces creíble y creciente Sociedad de Locutores. Hoy de aquella vieja camada, con placer y nostalgia sigo admirando a dos de los pocos próceres vigentes, ROBERTO GONZALEZ RIVERO y ELDA MORENO. Seguramente estos, cuando aprecian a sus colegas graduados de hoy, imperiosamente recalaran en el recuerdo de aquellos nombres que como en mi caso, permanecen aún en mis oídos.
A todos, aquellos olvidados y actuales locutores, vaya mi saludo. YO, EL OYENTE les desea FELIZ DIA.