Una de las grandes hacedoras de fantasías en la radiofonía del país, fue la Señora Delia González Márquez. Sus radioteatros, se ubicaron entre los preferidos de una audiencia ávida de tramas idílicas, con finales felices. Esta generadora de lágrimas y suspiros, falleció en Buenos Aires el 25 de Julio de 2006-
En estos tiempos en que debemos rendirnos atónitos y sin defensa alguna, ante la triste realidad de la radio del agravio y el descaro, donde vaya a saber porque razón, triunfan los que prorrumpen con procacidad en sus palabras, solo nos queda retroceder rendidos en el tiempo.
¡Que contrariedad!, para disfrutar de la buena radiofonía que nos caracterizó, ¿debemos retroceder en el tiempo?, sí, es paradójico, pero real.
En este recapitular en la reminiscencia, encontramos infinidad de protagonistas, en el rubro que se nos ocurra, desde maestros de ceremonias, hasta grandes libretistas. En esta brecha existieron una innumerable cantidad de profesiones, que sería hasta utópico mencionar. Hoy, quienes comienzan a tener contacto con este mágico aparatito, hacedor de imaginaciones, solo creen que la radio es esta, la estrictamente periodística, por llamarla de alguna manera. Quizá correspondería utilizar palabras exactas, radio bazofia, insolente, pendenciera, procaz.
Pero en esta evocación a los protagonistas de aquella vieja radiofonía que cautivo a muchos, resulta irreverente blasfemar como prologo de un afecto.
Suspiros, broncas, lágrimas y sonrisas, representaron los rictus en los corazones, de las apasionadas damas que hicieron de la radio su compañera inseparable. Los radioteatros, fueron por excelencia el sello indeleble de cada emisora. Si bien estos ciclos tenían sus comentes, estos, eran solo interpretes de aquello que como las pinceladas del mas eximio pintor, plasmaban en el papel cuanta historia esculpieran con asombrosa creatividad.
Entre esas hacedoras, figura una de las ilustres escritoras de historias cercanas a la realidad de cualquier damisela. Hoy se cumplen cuatro (4) años de la desaparición física de la señora Delia González Márquez, quien primero en radio y luego en televisión, le diera vida a los máximos éxitos que podamos recordar.
Hablar de esta escritora y de sus creaciones, resultaría extenso, solo corresponde recordarla como una de las mas prolíficas plumas del radioteatro nacional. Esa trayectoria, le significó no solo el reconocimiento de quienes fueron sus inseparables oyentes, que aún hoy la recuerdan, sino también de altas esferas del quehacer cultural.
En 2001, El Gran Premio de Honor Argentores, a Delia González Márquez, selló el merecido reconocimiento a esta inagotable libretista de radio, con títulos, entre los que se destacan, "Un mundo de veinte asientos", "De profesión ama de casa", "Mis queridas mujercitas", "Amor gitano", y "Muchacha italiana viene a casarse", entre otros.
¿Llegará alguien que también retroceda en el tiempo, e ilustre a los nuevos responsables de medios, sobre aquellos eximios, que sin tecnología, supieron hacer RADIO de VERDAD?